sábado, 15 de marzo de 2008

Semblanza de un apóstol de la libertad



Desde el momento en que realicé un artículo sobre Duarte y Mella, tácitamente quedaba comprometido a realizar un escrito sobre el onomástico del patricio Francisco del Rosario Sánchez. El nueve de marzo de [1817], en el ocaso del período de lo que en la historia se conoce como la ‘’España Boba’’, nace el segundo hijo de Olaya del Rosario y el primogénito de Narciso Sánchez. ¡Demás queda decir quien es!

Francisco del Rosario Sánchez, fue la praxis de lo que fue Duarte, pues, las ejecutorias materiales fue él quien las llevó a cabo, mientras en el ostracismo se encontraba su gran amigo e ideólogo de la causa independentista, Juan Pablo Duarte, quien regresó a la media isla el 15 de marzo de [1844]…, ya independizada.

Una vez derrocado el gobierno de Boyer, Charles Herald, viaja a la parte Este de la isla, Sánchez, perseguido, sale de Los Llanos hacia Santo Domingo; hace un record al cruzar el Ozama a nado, semejante a las hazañas de Marcos Díaz. La finalidad era hablar con el ideólogo Duarte sobre la llegada de Herald. Las autoridades lo buscaban como se buscaba en la década de los treinta ha Al Capone. Su ingenio fue fabuloso, pues, se hizo correr el rumor de que ‘’una enfermedad le había quitado la vida de forma súbita’’.

En la ausencia de Duarte, se hizo cargo del movimiento independentista, y como todo un gerente habilidoso, llevó por los mejores trillos esa causa inmaculada y de gran abnegación y lucha. Desde la clandestinidad en la que se encontraba, gran parte de los procesos de la conjura, fueron apoyados por Mella, quien le ayudó en todo momento a que se ejecutaran sin mayores inconvenientes.

El documento legal más antiguo que tiene la media isla en razón de legislación, fue redactado por el apóstol Francisco del Rosario Sánchez, al 16 de enero de [1844], mejor conocido como el ─manifiesto del 16 de enero─. Dicho documento, sirvió como modelo para los demás engranajes jurídicos sucesivos que se hicieron a la postre.

Sánchez del Rosario, en una reunión que se hizo el 24 de febrero de [1844], en presencia de Vicente Celestino Duarte [hermano de Duarte], los hermanos Jacinto y Tomas de la Concha, entre otros…, del cónclave independentista, le otorgaron el título de Comandante de Armas con el rango de coronel. Dicho reconocimiento se hizo por sus habilidades políticas y militares que dejó notar desde sus inicios.

En aquella madrugada del 28 de febrero de [1844], es izada la bandera nacional por el apóstol del Rosario Sánchez, con el lema de: ¡Dios, Patria y Libertada! Asimismo, junto a sus compañeros, en una ocasión dijo: ‘’Yo soy la bandera nacional’’. Con esas tres sublimes y únicas palabras: Dios, Patria y Libertadad, quedó fundada la República Dominicana, la indómita como dice Emilio Prudhomme en su himno nacional.

Cuando Mella propone en el Cibao Central que Duarte asuma la presidencia, al llegar dicha noticia a los oídos del sureño Pedro Santana, de inmediato sale de Azua hacia Santo Domingo, para impedirlo, pues, el infausto estaba lleno de envidia, hambre de poder y encolerizado por tal noble acción de los de la causa febrerilla.

Así, como se solicitaba en frente de Poncio Pilatos, que el Nazareno fuese crucificado, asimismo, unos innobles pelafustanes e imbéciles, solicitaban que los tres apóstoles, fuesen llevados frente al batallón… como viles criminales. ¿Qué forma de pagar la noble causa? Esos inútiles, le acusaban de traición a la patria, traición inventada para usurpar lo que no les pertenecía.

Francisco del Rosario Sánchez, el discípulo del padre Gaspar Hernández, fue enviado al exilio con sus dos compañeros: Duarte y Mella, el 22 de agosto de [1844], empero, Duarte salió el 10 de septiembre de dicho año. Luego regresó solo, viejo y enfermo veinte años más tarde.

El 18 de marzo de [1861], por el monto de [RD$175.000.00] pesos, se hizo negocios con la península ibérica, es decir, España, lo que se conoce como Anexión a España. Francisco del Rosario Sánchez, para impedir que esto se hiciera realidad, luchó por todos los medios, pero fue traicionado y fue fusilado por Santana, el 4 de julio de [1861] a las cuatro de la tarde en el cementerio de San Juan de la Maguana.