lunes, 29 de septiembre de 2008

Dos Ex-Presidentes, un Revolucionario y un Candidato


‘’Mientras los hombres sigan masacrando y devorando a sus hermanos, los animales reinarán en la tierra, la guerra y el sufrimiento, y se matarán unos a otros, pues, aquel que siembra el dolor y la muerte no podrá cosechar la alegría, ni la paz ni el amor. ’’
Pitágoras [582-500 a.C.]

Los prohombres que han dejado sus huellas indelebles a través de la historia, en muchas ocasiones, no en todas, han sido objeto de disidencias, ignominias, oprobios y felonías; que han acabado con la existencia de aquellos que quisieron darlo todo por ver realidad un país y un mundo mejor. Añoraban que la desigualdad, racismo, pobreza, injusticia, etc., sólo fuesen cosas de antaño y ensueños utópicos del ayer. Quizás, estos prohombres, quisieron en algún momento poder montar aquellos inicuos en la nave de Caronte y darles un paseo por la laguna Estigia, para luego calmarles la sed infecunda con un trago de Letos.

Nunca se imaginó aquel muchacho delgaducho y alto que había nacido en una caja de manzanas y que trabajaba como transportista de pasajeros en una barcaza en el río Ohio, que llegaría a convertirse en el primer Presidente del Partido Republicano. En uno de esos viajes con el timonel en las manos como de costumbre y que luego lo llevaría, pero desde la presidencia de su país, presenció la venta de unos esclavos, dejando de forma indeleble aquellas imágenes en su reminiscencia humanista, para luego combatir y abolir esa afrenta impúdica…, ese hombre fue Abraham Lincoln.

Cuando faltaban cuatro décadas para que el siglo XIX cerrara su ciclo, es decir, en [1860], es elegido Presidente. Tenía un encanto oratorio como el de un Demóstenes o un Cicerón, pues, su discurso de Gettysburg, es una de las mejores muestras de ello. La Proclamación de la Emancipación y otras cosas más, fueron el acicate para el atentado contra su vida. Las manos cenagosas de John Wilkes Booth y diciendo la siguiente frase: ‘’así siempre a los tiranos’’, le aceleró el ocaso al ilustre Abraham Lincoln, aquel 15 de abril de 1865 en el Teatro de Ford, el disparo del magnicida.

Otro preclaro prohombre de concepciones mesiánicas, había surgido en Estados Unidos de Norteamérica, justamente un siglo después de que se hiciera Presidente Abraham Lincoln, logrando la presidencia en [1960], autor de la frase: ‘’No preguntes lo que tu país puede hacer por ti; pregunta lo que tú puedes hacer por tu país." Este hombre de pruritas ideas era nada más que John Fitzgeral Kennedy, Ex-Presidente que tenía las mismas inquietudes que su antecesor y homólogo Abraham Lincoln. Aquella lucha por la igualdad de los estadounidenses sin importar color de piel, religión, ideas políticas, etc. El protagonista de la invasión de Bahía de Cochinos y la Crisis de los misiles en Cuba, buscaba hacer de Estados Unidos de Norteamérica, Utopía y de Washington Amaurota, el ensueño de Tomás Moro.

Aquel 22 de noviembre de [1963], último día de John F. Kennedy, aún guarda un enigma que ni llevándolo al ─Oráculo de Delfos─, podríamos llegar a una esclarecida conclusión del móvil de aquel asesinato, y surgen las interrogantes: ¿Por qué el conductor del vehículo (chofer de Kennedy) frenó y no avanzó con prontitud al recibir el primer disparo? ¿La Agencia Central de Inteligencia CIA, tuvo realmente algo que ver con el asesinato? ¿Es fidedigno el resultado de la comisión Warren, creada por el vicepresidente y luego Presidente Lyndon B. Jonson? ¿Era y ha sido un señuelo Lee Harvey Oswald, el asesino de Kennedy? ¿La Agencia Federal de Investigación FBI realmente tuvo algo que ver en el inextricable caso? ¿El Ku Klux Klan dejó extender sus ideas y manos terroristas en este caso? ¿Qué de Jacqueline Bouvier Kennedy, realmente tuvo algo que ver con el asesinato? Extraiga de sus convicciones amigo lector, que es lo cierto o falso en este caso para usted.

Para tratar de darle continuidad a lo que habían hecho Lincoln y Kennedy, surge otro de características afables y conciliador, dando un discurso que lo hizo muy famoso conocido como I have a Dream o tengo un sueño y que se realizó el 28 de agosto de [1963], parte del discurso decía lo siguiente: ‘’Sueño que mis cuatro hijos vivirán un día en un país en el cual no serán juzgados por el color de su piel, sino por los rasgos de su personalidad’’. Martín Luther King, Jr. Su último día en la tierra fue el 4 de abril de [1968].

Quizás allá en ultratumba, en lontananza del averno, seol o el hades o del paraíso y no en el hades, seol o averno, porque hombres como estos no visitan estos caliginosos lugares, seguro se reirán complacido, Lincoln, Kennedy y Luther, porque aún una brizna o ínfima ganancia se ha podido conseguir en la tenaz lucha del racismo, pues, aunque los tres han sido asesinados por la inclemencia de la ignorancia, desfachatez y cienudos cerebros de la iniquidad, hoy surge un logro para aquellos que no lo pudieron ver.

El Senador por Illinois y afroamericano Barack Hussein Obama, sería el primer Presidente de la nación de origen negro, creando una nueva página en la historia de Estados Unidos de Norteamérica, aunque no es necesario ganar la candidatura para pasar a la historia, ya es parte de ella.

Queda decir, ¿el Ku Klux Klan, no intentaría hacer un atentado contra la vida de Barack Obama, si este gana la presidencia?

Glosario:
Caronte: era el viejo barquero que transportaba las almas de los muertos por la laguna Estigia hasta las puertas del mundo subterráneo. Admitía en su barca sólo a las almas de aquellos que habían recibido los ritos sepulcrales y cuyo paso había sido pagado con un óbolo colocado bajo la lengua del cadáver. Aquellos que no habían sido sepultados y a quienes Caronte no admitía en su barca eran condenados a esperar junto a la laguna Estigia durante 100 años.

Laguna Estigia: En la mitología griega, zona pantanosa del río Éstige en la que se encontraban los espíritus errantes de los muertos que no habían sido sepultados.
Letos: Pozo donde bebían los muertos para olvidar su vida anterior.